¿Qué son el labio leporino y la fisura palatina?
El labio leporino y la fisura palatina son malformaciones congénitas que afectan la anatomía facial de los bebés. Pueden presentarse de manera individual o combinada. El labio leporino es más común en los niños, mientras que la fisura palatina se presenta con mayor frecuencia en las niñas.
- Labio Leporino: Se trata de una abertura en el labio superior que puede ser unilateral o bilateral, afectando la zona entre la boca y la nariz.
- Fisura Palatina: Es una abertura en el cielo de la boca que conecta la boca y la nariz.
- Fisura Labio-Palatina: En algunos casos, ambas malformaciones se combinan, afectando el labio superior, la región alveolar y el paladar duro y blando.
¿Cuándo se diagnostican el labio leporino y la fisura palatina?
El diagnóstico de estas malformaciones puede realizarse durante el primer trimestre del embarazo mediante pruebas de ultrasonido. No existe una causa única, pero tanto factores genéticos como externos (como la exposición a tóxicos y medicamentos) pueden influir en su aparición.
¿En qué puede afectar el labio leporino y la fisura palatina?
Estas condiciones pueden afectar varias funciones esenciales, incluyendo:
- Alimentación: Dificultades para succión y deglución en los primeros meses.
- Audición: Riesgo de infecciones del oído y pérdida de audición.
- Nacimiento de los dientes: Alteraciones en la formación dental.
- Desarrollo del maxilar: Posibles problemas en la alineación de los dientes y mandíbula.
- Habla: Dificultades para pronunciar ciertos sonidos, especialmente durante los primeros años de vida.
¿Cuándo se puede operar el labio leporino y la fisura palatina?
El labio leporino generalmente se opera entre los 3 y 6 meses de edad, mientras que la fisura palatina suele requerir cirugía alrededor del año de vida. Sin embargo, cada caso es único, y los profesionales valorarán la cirugía y su momento adecuado según las necesidades específicas del bebé.
¿Dónde acudir para tratar el labio leporino y la fisura palatina?
El primer paso es acudir al pediatra, quien evaluará el desarrollo del bebé y derivará a los profesionales adecuados para un tratamiento integral. Los especialistas involucrados suelen incluir:
- Cirujano pediátrico
- Cirujano maxilofacial
- Logopeda especializado (importante para la rehabilitación postquirúrgica)
- Ortodoncia (en caso de necesidad de corrección dental)
- Otorrinolaringólogo (para problemas auditivos)
¿Cómo se trata el labio leporino y la fisura palatina?
El tratamiento de estas malformaciones requiere de un equipo multidisciplinario que trabaje de manera coordinada para ofrecer una intervención integral. Esto incluye no solo cirugía, sino también atención en áreas como el habla, la alimentación y la función auditiva. El trabajo en equipo es esencial para asegurar una recuperación óptima del bebé.
Dpto logopedia Arenas de Mónsul
Melani Sola Martínez
Logopeda especializada en terapia miofuncional
